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L&S.- Si sufre de tener mal olor en los pies o bromhidrosis, sepa que no es el único. De hecho, forma parte de un grupo de muchos millones de personas. Ellos comparten el mismo problema que usted en el mundo. Se calcula que aproximadamente al 10 -15% de la población le huelen mal los pies. El problema tiene nombre. Se llama «bromhidrosis».
Si le huelen mal los pies, sepa que todo comienza a partir del sudor. No es un sudor diferente en composición al del resto del cuerpo, aunque es cierto que son los pies los órganos que más sudan. En cada uno de ellos hay más de 250.000 glándulas sudoríparas. Pueden llegar a excretar medio litro de sudor cada uno en un día. Y aunque no es el sudor el verdadero responsable del mal olor en los pies, si se suda mucho y se dan las circunstancias idóneas para su descomposición, va a aumentar mucho el problema.
La bromhidrosis o mal olor en los pies tiene su origen en la proliferación de una bacteria llamada Kyetococcus sedentarius. Esta se alimenta del sudor y de los elementos que lo componen. Ahí está la correspondencia del sudor cuándo le huelen los pies. Este pasa a ser el sustrato para que las bacterias se desarrollen a plenitud. Esta bacteria produce en su propio metabolismo unos ácidos orgánicos malolientes. Además, también produce unas sustancias que se conocen como «compuestos sulfuro volátiles» que huelen parecido al huevo podrido.
Cuándo esas bacterias se encuentran en un entorno muy húmedo y cálido como el que se forma en los pies; los calcetines y los zapatos; entonces las bacterias tienen el entorno idóneo para reproducirse en grandes cantidades. Por lo tanto, sólo cabe esperar que produzcan una mayor cantidad de estos ácidos orgánicos y compuestos sulfuro volátiles. Lo que es lo mismo: ¡peste! A esto se suman las fibras sintéticas con las que están fabricados los calcetines y el interior y suela del calzado. Tenemos todos los factores propicios para mantener los pies muy quietos cuándo estamos en público; y cuándo estamos en casa tener que poner nuestro calzado fuera; en la terraza o en el patio para «no ofender» a nuestra familia.
Sí. El problema del mal olor en los pies puede estar agravado por el estrés; desequilibrios hormonales; la toxicidad; contagio por hongos; la ingesta de aciertos medicamentos, etc. y para algunas personas este es un serio problema que les condiciona la vida. Pero no es más fácil para quienes les rodean, pues tener al lado a alguien a quién le huelen mal los pies constantemente es un verdadero suplicio.
Un consejo es calzar zapatos limpios y si es posible de tela o piel natural; calcetines limpios y sobre todo de algodón; plantillas de carbón, etc. pero aún con todos estos cuidados, lo cierto es que hay personas que cuándo se quitan los zapatos no se puede estar cerca de ellas. Algunas veces, incluso con los zapatos puestos. Les huelen mal lo pies tanto que la gente se separa de ellos porque es una verdadera agresión a su sentido del olfato.
Otro consejo sería cambiar el calzado a diario para que la humedad no se mantenga dentro de ellos. Así, cada día se pondrá unos zapatos secos. Puede también tomar cápsulas salvia natural. Es un suplemento que hace que se sude menos.
Usar bicarbonato. El bicarbonato de sodio induce a la oxigenación. 1 o 2 cucharaditas de bicarbonato de sodio dentro de los zapatos absorberán la humedad y eliminará el mal olor en los pies. También debería espolvorear los pies recién lavados.
Vinagre de sidra de manzana. Ponga un chorro grande de vinagre de manzana en una palangana con agua caliente y sumerja los pies durante 15 min todas las noches. Eliminará el mal olor en los pies.
Si los pies huelen muy fuerte, utilice té negro. El té negro contiene ácido tánico con poderosas propiedades astringentes que impiden que se sude en exceso. Haga una infusión con 5 bolsitas de té negro en 1 lt de agua hirviendo. Déjela que se entibie en una palangana y haga un baño de pies de media hora.
Use Jabón de Alepo en su aseo diario. El jabón de Alepo es un magnífico antibacteriano y su uso es la mejor manera de quitarse el mal olor en los pies. También en el resto del cuerpo. Aparte de utilizarlo en la ducha, al llegar a casa por las noches lave bien los pies con agua caliente y jabón de Alepo. Evitará que las bacterias se descompongan. Primero porque reducirá la cantidad que habita en los pies y segundo porque evitará que éstas se reproduzcan.
Haga baños de sal con sal del Himalaya. Cuándo se tiene mal olor en los pies porque sudan en exceso, los baños de pies con sal del Himalaya; cuyos cristales son más grandes que la sal común; ayuda a eliminar el hedor. Una vez haya terminado no enjuague. Deje la sal en los pies.
Evite el estrés. Puede ser el responsable de que le huelan mal los pies. La ansiedad y el estrés sostenido hacen que aumente la secreción de sudor. De hecho, en etapas de especial estrés hay personas que notan que aumenta el mal olor en los pies y en todo su cuerpo. Quizás si ese es su caso debería plantearse alguna técnica para reducir el estrés.
Aliméntese de manera inteligente. A veces el mal olor en los pies puede estar relacionado con ciertos tipos de alimentos que se consumen. Sabores muy fuertes como ajos, cebollas, pimientos, etc. si se consumen por personas con tendencia al mal olor en los pies; puede que el hedor resulte ser mayor. Si ese es su caso mantenga esos alimentos alejados de su dieta. Sobre todo en invierno, que es cuándo los pies van más cubiertos.
De todos los remedios naturales, el más eficaz es la piedra de alumbre en polvo. Es el desodorante natural más efectivo de todos los que hemos mencionado. Cumple con todo lo que se necesita para combatir el mal olor en los pies. Es un magnífico desodorante antiséptico natural muy astringente. Evita el exceso de sudor y se puede utilizar sin riesgo ninguno. A diferencia de desodorantes para pies que hay en el mercado, el polvo de piedra de alumbre no resulta irritante, no produce alergias ni lleva productos químicos. Tiene la capacidad de cerrar los poros y regular la secreción de sudor, eliminando a su vez las bacterias que provocan que le huelan mal los pies.
Utilice el alumbre después de lavar los pies con jabón de Alepo y estando aún mojados. Espolvoree alumbre en ellos y frote bien por todas partes. Incluso entre so dedos; y ponga calcetines limpios. En el agua puede poner también té negro, como hemos dicho o vinagre de manzana, sal del Himalaya, o las 4 cosas.
Ponga también dentro de los zapatos o de los deportivos la cantidad de polvo de alumbre suficiente. Cubra toda la zona que va a estar en contacto con los pies dejando el sobrante dentro, para que al meter el pie se distribuya por toda la superficie.
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