El bocio es el nombre de un feo abultamiento en la garganta
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L&S.- La enfermedad llamada bocio se caracteriza por un aumento de tamaño o por inflamación de la glándula tiroides y muchas veces es ese el único síntoma que se produce. Otro de los síntomas es ronquera producida por la compresión ejercida por el bulto o tumor que conforma la inflamación de la tiroides sobre la tráquea desde la zona anterior del cuello, lugar en que está ubicada. A saber: en la región cervical anterior (delante de la tráquea y debajo de la laringe). Vea más en «Bocio endémico y déficit de yodo: ¿sigue siendo una realidad en España?» (Asociación Española de Pediatría).
Origen del problema
El bocio puede ser según sus características:
- Difuso o con un aumento regular de la glándula tiroides.
- Multimodular, en el que se producen aumentos focalizados de la tiroides o nódulos.
- Normofuncionante (se presenta con una función tiróidea normal), el bocio por hipofunción y por hiperfunción.
La primera causa y la más extendida de esta inflamación de la tiroides, es la causa idopática. También se denomina bocio idiopático. La segunda es la deficiencia de yodo o bocio endémico. Dicha deficiencia puede ser producida por exceso o por deficiencia de yodo. Es algo que se puede contrarrestar con un suplemento en la alimentación que contenga yoduro o yodato.
Otra importante causa es la acción de los bociógenos. Son los agentes que lo provocan. Un ejemplo de algunos bocígenos son ciertos fármacos cuyos efectos adversos producen la inflamación de la glándula tiróides.
También:
- algunas sustancias químicas presentes en el agua o bebidas que alteran el proceso de metabolización del yodo por el cuerpo;
- la predisposición genética;
- algunos defectos congénitos enzimáticos en la biosíntesis de hormonas tiroideas;
- ciertas enfermedades como sarcoidosis o amiloidosis;
- algunos tumores;
- una tiroiditis,
- etc.
Si bien, la causa común en todos los casos, tal como hemos mencionado anteriormente es la falta de yodo.
Otros de los causantes causantes pueden ser: Tiroiditis de Hashimoto, Enfermedad de Graves-Basedow, Bocio juvenil (por hipotiroidismo congénito), Neoplasia de la tiroides, Tiroiditis (aguda, crónica).
Bocio – Diagnosis
Es una enfermedad que se diagnostica primeramente por palpación, siendo muy evidente la tumoración e inflamación de la glándula tiroides. El médico puede también pedir que se realice una ecografía tiroidea; la cual aporta datos relativos al tamaño, forma y función y grado de inflamación de la glándula tiroides. Sobre todo en lo que tiene que ver con la existencia de nódulos. Una gammagrafía tiroidea identifica los nódulos y una punción nodular indicará la malignidad o benignidad del mismo.
Para un diagnóstico completo se lleva a cabo el examen de la hormona estimulante de la tiroides (TSH). Esta hormona la produce la hipófisis. Esta da orden a la glándula tiroides de producir y secretar las hormonas tiroideas en la sangre. El examen es la manera de saber si el bocio es normo, hipo o hiperfuncionante.
En caso de que sea del tipo nodular, será necesario realizar una punción a fin de conocer la estructura que forma el nódulo y tener un acercamiento al origen del nódulo (si es benigno, o maligno).
Tratamientos
Con un tratamiento adecuado, no se presentan problemas. El tratamiento y la curación del bocio endémico consisten en suplementar la alimentación con yodo en forma de yoduro o yodato. Hay fármacos formulados con ese fin y será el médico quién ponga el tratamiento.
Tratamiento natural
El mejor tratamiento natural de apoyo al bocio es también consumir alimentos ricos en yodo. Pero de fuentes naturales, como las algas. Stemenhance Ultra es un compuesto muy rico en yodo orgánico altamente biodisponible. Aporta además, otras sustancias que actúan en sinergia con el yodo.