La gota es extremadamente dolorosa
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L&S.- La gota es una patología reumatológica extremadamente dolorosa. Afecta a alrededor del 2% de la población en general, siendo cuatro veces más común en hombres que en mujeres. Sobre todo en varones de edad media. Aunque también puede darse más en mujeres durante la menopausia. Está provocada por una acumulación anormal de cristales de sales de urato o ácido úrico. Acumulaciones que se producen en diversas zonas del cuerpo, pero especialmente en las articulaciones, en los tejidos blandos y en los riñones.
Como ya hemos dicho antes, la gota resulta ser una de las expresiones de la artritis más dolorosas que existen. Provoca ataques de dolor extremo, acompañado de inflamación y enrojecimiento. Especialmente en el dedo gordo del pie.
¿Qué es el ácido úrico?
El ácido úrico es el producto resultante de la descomposición de las purinas. Estas se encuentran en todos los tejidos del cuerpo. Las purina también son ingeridas por ser uno de los componentes de ciertos alimentos. Por ejemplo del hígado, los frijoles (alubias, porotos o judías), los guisantes (arvejas) secas y también en las anchoas, las carnes, los mariscos, etc. Es muy importante que las personas afectadas con la gota tengan claro qué alimentos son los que desencadenan los ataques.
Cuándo ocurre una alta concentración de ácido úrico en la sangre es conocido como hiperuricemia. Esta condición no siempre deriva en gota. Sin embargo podría presentarse si se forman cristales de ácido úrico en exceso. Dichos cristales son microscópicos. Su acumulación puede ser importante, llegando a veces a formar tofos abultados por debajo de la piel. Estos cristales también pueden depositarse en los riñones, provocando cólicos nefríticos y otras alteraciones funcionales. Se puede decir al respecto que casi el 20% de los pacientes afectados por la gota desarrollan también cálculos renales, complicando más (si cabe) el cuadro clínico del paciente.
Se presenta cuándo:
- El cuerpo no es capaz de eliminar el ácido úrico porque produce más de lo que elimina.
- Los riñones no eliminan ácido úrico suficiente.
- Se ingiere un exceso de alimentos ricos en purinas en la dieta diaria.
Principales síntomas:
- Hinchazón.
- Calor.
- Dolor.
- Enrojecimiento.
- Rigidez en la articulación.
Se pueden ver comprometidas las siguientes zonas del cuerpo:
- Dedo gordo del pie.
- Talones.
- Rodillas.
- El arco del pie.
- Los tobillos.
- Las muñecas.
- Los dedos de la mano.
- Los codos.
Las posibles causas de ataques de la gota
La gota puede desencadenar ataques como consecuencia de experiencias estresantes. También por el abuso del alcohol o las drogas o debido a otras enfermedades. Los primeros ataques por lo general mejoran dentro de un periodo de tres a diez días. Aún sin un tratamiento. Puede ser que el próximo ataque no ocurra hasta pasados meses o años después del último episodio.
La ingesta de algunos alimentos, así como la destrucción y formación de células, pueden contribuir a un exceso de ácido úrico en la sangre. Este exceso se produce por problemas de excreción. Un cuerpo sano los elimina a través de los riñones de forma natural excretándolos por la orina. Cuándo este proceso no funciona correctamente y el nivel de ácido úrico no se corrige, aumenta anormalmente. Eso se traduce en la formación de cristales que se depositan en las articulaciones. Lo que da lugar a episodios agudos de dolor a causa de la gota.
Lo que hace que el ácido úrico aumente es:
- Obesidad.
- Hipertensión arterial.
- Abuso del alcohol.
- Ingesta desmesurada de alimentos precursores del ácido úrico.
- En menor medida, cansancio y estrés emocional.
Los alimentos que deben restringirse:
- Carnes, principalmente carnes rojas y carnes de caza como jabalí, venado y liebre.
- Pescados, principalmente sardinas, anchoas, atún, caviar y huevas de pescado.
- Vísceras, incluyendo mollejas, riñones, hígado y cerebro.
- Mariscos, gambas, cangrejos, cigalas, mejillones, etc.
- Alcohol. El alcohol es un factor determinante en el incremento de ácido úrico a nivel plasmático y en los tejidos periféricos. Este favorece la producción de urato monosódico e induce a una deficiente excreción del ácido úrico. Esto se aplica especialmente a la cerveza.
Síntomas de la gota
La gota se sufre con ataques continuos de dolores muy agudos. Se presentan de forma repentina. Se caracterizan por un dolor intenso que va en aumento y por la hinchazón de la articulación. La gota afecta principalmente a la primera metatarso-falángica del pie. Es la hinchazón del dedo gordo del pie tan característica.
Esta fase de la gota recibe el nombre de podagra. La piel se enrojece y, la persona siente calor en la zona afectada, además de un dolor agudo e intenso al tacto. Al paciente con la gota no le puede rozar nada por el intenso dolor. No aguantan ni el roce de las sábanas en la cama.
Pueden, también verse comprometidas otras articulaciones del pie. También, rodillas, muñecas, orejas y demás tejidos periféricos de naturaleza fría debido a que las bajas temperaturas cristalizan antes los uratos. En ocasiones, pueden sufrir inflamación la bolsas sinoviales y tendones, lo que causa bursitis y tenosinovitis respectivamente. Las crisis en la gota, pueden cursar con fiebre, escalofríos o taquicardia.
La gota crónica
Algunas personas pueden desarrollar gota crónica o artritis gotosa. Esta afección puede llevar a daño articular y pérdida de movimiento en las articulaciones. Las personas con gota crónica sufrirán dolor articular y otros síntomas la mayor parte del tiempo.
Los tofos son abultamientos externos debajo de la piel alrededor de las articulaciones o en otros lugares como las puntas de los dedos y las orejas. Estos se pueden desarrollar sólo después de que una persona haya tenido la enfermedad durante muchos años. Dichos tofos propios de la gota pueden supurar.
Los primeros ataques de la gota suelen ubicarse en una única articulación y no son episodios largos. Pero si la persona no es sometida a tratamiento, el trastorno puede ir extendiéndose a varias articulaciones y propiciar la aparición de tofos seguidos de cólicos nefríticos.
Diagnóstico
La gota es diagnosticada por criterio clínico del médico. El facultativo se basa sobre todo en los síntomas de la gota, los cuales van a indicar la existencia de la misma. También el estudio de las articulaciones que son objeto del dolor. Un exceso de ácido úrico en una analítica será lo que confirme el diagnóstico de la gota. Algunas veces, el médico puede requerir extraer líquido de la articulación a fin de comprobar la presencia de cristales de ácido úrico a través del microscopio.
Por lo tanto, el especialista puede considerar pedir:
- Análisis del líquido sinovial.
- Ácido úrico en la sangre.
- Radiografía de la articulación.
- Biopsia sinovial.
- Ácido úrico en la orina.
Notas sobre el diagnóstico de la gota: no se debe confundir la gota, con la «pseudogota». Esta última es el trastorno provocado por un cúmulo de cristales de pirofosfato de calcio. No de uratos como en la gota. La pseudogota suele presentarse en personas mayores. Afecta igual a hombres y mujeres. Los episodios dolorosos son menos intensos que en la gota.
Consejos para mejorar los síntomas
- Disminuir el consumo de alcohol, especialmente cerveza.
- Bajar de peso.
- Hacer ejercicio físico diariamente.
- Reducir el consumo de carnes rojas y bebidas azucaradas.
- Escoger alimentos saludables como verduras, nueces, legumbres, frutas (menos las muy azucaradas) y granos integrales.
- No beber café y tomar suplementos de vitamina C.
Tratamientos
Con la gota ya diagnosticada de forma positiva, lo más urgente es calmar el dolor. Para ello se utilizarán antiinflamatorios no esteroideos, como el Ibuprofeno, o en el mejor de los casos, un antiinflamatorio natural como la raíz de harpagofito.
Los tofos deberían desaparecer al bajar los niveles de ácido úrico. No obstante hay veces en que deben ser extirpados quirúrgicamente debido a su tamaño.
Puede ser necesaria la inmovilización de la articulación.
Tanto para movilizar y excretar los cristales, como para prevenir futuros ataques, se recomienda beber mucho líquido. Sobre todo agua. Se deben evitar totalmente las bebidas alcohólicas y llevar una dieta sana, rica en verduras (sobre todo crudas), frutas y cereales y escasa en carnes rojas y sobre todo mariscos y pescado azul. El médico puede valorar otros tratamientos.
Dentro de los tratamientos naturales más eficaces, están los que son –sobretodo- preventivos de nuevos ataques de la gota. Entre ellos, se encuentra el beneficio que produce en la eliminación de toxinas y de uratos que provoca el uso de los complementos Stemenhance y Plasmaflo. Están elaborados a partir del alga AFA (estimuladoras del crecimiento de las propias células madre del cuerpo) con una combinación de otras algas verdiazules altamente eficaces en la desinflamación de tejidos, la eliminación de residuos como el plomo y la regeneración de órganos de eliminación, como son los riñones. Además, aportan una gran cantidad de antioxidantes naturales y anti radicales libres que benefician al cuerpo en general en vez de perjudicar, como puede ocurrir con los fármacos antiinflamatorios.
Resulta de gran utilidad aplicar en la zona compresas con alcohol de romero
La gota aparecerá más fácilmente si la persona:
- Tiene sobrepeso.
- Es hombre.
- Tiene el factor de la herencia.
- Come demasiados alimentos ricos en purinas.
- Toma demasiado alcohol, sobre todo cerveza.
- Tiene una enzima defectuosa que hace difícil que el cuerpo descomponga las purinas.
- Ha tenido un trasplante de órgano.
- Está expuesta al plomo (metales pesados) en el medioambiente.
- Toma medicamentos tales como diuréticos, aspirina, ciclosporina, etc.
- Toma la vitamina niacina.
Lea: La clorofila (Parte II)
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Alcohol de romero
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Suplemento que consigue una liberación alta de células no especializadas. Puede ver los 3 productos que actúan en sinergia:
Descargue aquí el Pdf con la Información oficial del descubridor de las células madre adultas en el alga AFA
Referencias:
Khanna D, Fitzgerald JD, Khanna PP, Bae S, Singh MK, Neogi T, et al. 2012 American College of Rheumatology guidelines for management of gout. Part 1: Systematic nonpharmacologic and pharmacologic therapeutic approaches to hyperuricemia. Arthritis Care & Research. 2012;64(10):1431-46.
Khanna D, Khanna PP, Fitzgerald JD, Singh MK, Bae S, Neogi T, et al. 2012 American College of Rheumatology guidelines for management of gout. Part 2: Therapy and antiinflammatory prophylaxis of acute gouty arthritis. Arthritis Care & Research. 2012;64(10):1447-61.
Choi HK. A prescription for lifestyle change in patients with hyperuricemia and gout. Current Opinion in Rheumatology. 2010;22(2):165-72.
La gota es una enfermedad terrible. Llevo años usando un bastón para poder moverme. He probado de todo y creo que no está demás el probar lo que en este artículo se recomienda como alternativa. Es muy interesante.
Gracias!