Alimentos industriales y alimentos sanos
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L&S.- Bajo la denominación de «alimentos sanos» suelen englobarse los que están hechos en casa y también los alimentos no refinados o integrales. Pero «alimentos sanos» en principio deberían ser todos. Salvo, por supuesto, que estén contaminados con sustancias nocivas o estropeados. De modo que esa manera de denominarlos debería ser una redundancia. Por desgracia no siempre es así; y más si incluimos a los alimentos industriales o alimentos precocinados.
¿Son sanos los alimentos industriales?
Para entender mejor lo que hace que no sean sanos los alimentos industriales, vamos a poner un ejemplo una mermelada de frutas. En principio no debería haber una gran diferencia entre la que se ha hecho en casa y la que hemos comprado procedente de una fábrica en cuánto a ingredientes. Los nutrientes deberían ser los mismos. Una mermelada no es otra cosa más que pulpa de fruta fresca cocida con azúcar. En el proceso se espesa y al enfriarse se queda deliciosa. Debería tratarse de alimentos muy aconsejables.
La lógica nos haría pensar pensar que la mermelada elaborada en la fábrica tendría que tener más garantías higiénicas (si cabe) que la artesanal. Partimos de una misma receta y de los mismos principios. A saber: los alimentos; y la gran diferencia sería solamente la cantidad que se procesa. Pero desgraciadamente esto no es así. El abaratamiento de los costes para un mayor beneficio en los alimentos industriales hace que se utilice más cantidad de azúcar en proporción a la pulpa de fruta. Así se economiza en materia prima.
Con lo que se consigue lo demás
La falta de alimentos naturales se suple con sabores artificiales y espesantes. Ahí es dónde hacen su aparición los tóxicos. En los alimentos industriales también se utiliza la pectina para sentar esa mayor cantidad de azúcar… y ni qué decir tiene que hay que añadir conservantes a fin de hacer grandes producciones de alimentos y no perder dinero. Con eso se acaba de cerrar el círculo.
En conclusión. Lo que llega a nuestra mesa es de todo, menos alimento. Algo que no tendría necesariamente que ser un alimento artificial se convierte en una mermelada o confitura industrializada. Un alimento nada recomendable que se anuncia como «artesanal», o de «pura fruta», pretendiendo evocar formas domésticas ancestrales de preparar los alimentos. Lo cierto es que todo se queda en un bonito diseño que tiene su apariencia. A veces incluso añaden a la tapa una tela de cuadritos rojos y blancos o de otros colores y una cuerdecita. el propósito es darle a lso alimentos industriales un mayor aspecto de que lo hizo nuestra abuela y que está en la despensa. Planes de Marketing bien orquestado para vendernos los alimentos y dejarnos tranquilos.
Eso ocurre con todo lo que resulta en un negocio. Pasa algo parecido con todos los alimentos industriales. Por lo tanto, lea bien siempre todo lo que pone en las etiquetas.