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L&S.- Reanudar las relaciones sexuales ‹normales› o completas, está contraindicadas durante la cuarentena. Sólo tras ese período y después de visitar al médico, se podrán iniciar nuevamente y dar rienda suelta a la intimidad de la pareja. De hecho, la sexualidad después del parto es algo natural y necesario. Tras tantos meses en que sólo se ha tenido atención hacia el bebé es muy bienvenido. Hay que tomar en cuenta que es posible que las primeras veces que se tengan relaciones sexuales completas, pueda resultar doloroso. Sobre todo, si existe una cicatriz. Son los famosos puntos de la episiotomía, para los que se recomienda utilizar aceite de rosa mosqueta. Aún así, la sexualidad después del parto es algo que se debe atender.
También después del parto puede haber una falta de lubricación vaginal. Eso se puede corregir con aceite natural de rosa mosqueta. No olvidemos que el cuerpo de la mujer responde a reacciones hormonales en esta fase del pos parto. Pasa por diferentes experiencias hasta que vuelve a la normalidad. Condición que puede llevar incluso a falta de libido o exceso entre otras cosas; incluso apatía por su pareja. La pareja debe saber que la sexualidad después del parto puede conllevar un cierto estrés que se debe afrontar.
Centrándonos en el dolor y para evitar molestias innecesarias, un buen lubricante vaginal natural puede evitar gran parte de las molestias. Hará más agradable la vuelta a la sexualidad después del parto. Los masajes con aceite de rosa mosqueta pueden ayudar no sólo a lubricar de manera absolutamente natural; sino también a cicatrizar heridas, desgarros, etc. que hayan quedado con la episiotomía. También a que en las cicatrices de los puntos no se formen queloides. También, a que las relaciones sexuales sean menos dolorosas.
La falta de intimidad es otro de los factores que dificultan la sexualidad después del parto. Como consecuencia, obviamente, también las relaciones sexuales entre los padres del recién nacido. Él siempre va a estar presente por la noche y por el día. No olvidemos que durante la primera etapa de su vida, el nene es novedad en la familia. Tendremos al rededor constantemente a tíos; primos; abuelos y amigos de la familia por ambos lados de la pareja, visitando al chiquitín o chiquitina; lo que hace que la sexualidad después del parto sea una tarea casi imposible. Se junta a todo esto, el agotamiento físico que significa día y noche los llantos; las tomas; los cambios de pañales; los baños; los paseos; y también los ratos de mimo; tiempo todo dedicado por ambos padres al bebé.
Todos estos factores simplemente consiguen que ambos padres estén más apáticos frente a su sexualidad después del parto. La mujer en especial juega un papel mayoritario en estas tareas. Además, recordemos que su cuerpo está empezando un nuevo cambio hacia la normalidad. Habrá que ser conscientes de ello y tener paciencia… ambos.
Suele ocurrir en muchos casos, que los cambios hormonales después del parto producen en la mujer una cierta sensación de depresión. A veces junto con sensación de inutilidad y ansiedad. Es un exceso de preocupación por la seguridad y bienestar de un ser tan indefenso. Esto puede acarrear ataques ocultos de celos, por parte de la pareja masculina que no vive la paternidad con la misma intensidad emocional que la mujer vive su maternidad. Es otro de los factores que con frecuencia dificultan la sexualidad después del parto.
Son muchos los factores envueltos en las primeras relacione sexuales en un apareja que acaban de ser padres. Hablar y comunicarse es imprescindible y muy sano. Seguro que si se habla de todo esto, la pareja resultará estar mucho más unida; y se solidificará la relación y todo en su vida (incluso el sexo), será mucho más intenso.
Durante el tiempo que dure la lactancia, es muy importante tomar precauciones de un posible nuevo embarazo. El periodo no vuelve a hacer aparición, sino, hasta pasado más o menos un mes de haber dejado de dar el pecho al niño; y durante esa etapa existe un riesgo importante de quedarse embarazada.
El inicio de la regularidad en la sexualidad después del parto debe hacerse con precaución y el preservativo puede ser la mejor opción y la que más se utiliza. Las pastillas anticonceptivas tradicionales están contraindicadas en la fase de la lactancia. Algunos médicos prescriben las llamadas «mini»; un tipo de anticonceptivos que solamente llevan la hormona progesterona. Otra de las opciones que pueden barajarse, es el uso del DIU (Dispositivo Intra Uterino); que como sabemos, hay de varios tipos. Opciones que se pueden estudiar junto con el médico y será él quien aconseje según cada caso.
La sexualidad después del parto cambia y hay que afrontarla como algo nuevo y por descubrir.
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