Ginkgo biloba – El árbol de la longevidad

El ginkgo biloba para una vida larga

L&S.- El extracto de ginkgo biloba es uno de los suplementos más utilizados. Se obtiene de la hoja de un árbol denominado igual. A saber: Ginkgo biloba. Recibe también otros nombres, como por ejemplo «árbol sagrado», «árbol de las pagodas» o «árbol de los cuarenta escudos». Ginkgo biloba significa en japonés «albaricoque de plata». Se dice que es el árbol más viejo del mundo. Sus hojas son en forma de abanico con un corte en el centro y por eso lo del nombre «biloba» o dos veces lobulado. Eso lo hace muy fácil de reconocer.

Los árboles pueden ser hembras o machos. Y resulta muy difícil reconocer a qué género pertenecen. Se suelen plantar árboles macho en los parques debido a que las semillas del árbol hembra desprenden mal olor. Este árbol se reproduce por esquejes, injertos o semillas. Se han encontrado hojas fósiles de Ginkgo con más de 270 millones de años y se calcula que algunos ejemplares vivos pueden haber alcanzado más de 3.000 años. Es por eso que se le considera un «Fósil viviente».

Hasta el siglo VII en que se encontró en Japón y China, se creía que el Ginkgo biloba estaba extinguido, pero sucedía que los monjes budista habían descubierto sus propiedades terapéuticas y lo cultivaron cuidadosamente, preservándolo de su extinción y exportándolo a través del budismo.

Demencia por diferentes causas

Ginkgo-biloba – Árbol de la longevidad

En oriente es considerado un árbol sagrado y casi milagroso y se le asocia a la longevidad. Se cree que fueron los únicos árboles que sobrevivieron a las bombas de Hiroshima y Nagasaki en la Segunda Guerra Mundial.

En el siglo VII el botánico alemán Laempfer llevó desde Japón a Holanda (al jardín Botánico de Utrech) las primeras semillas que fueron plantadas en Europa.

Aunque en la medicina tradicional china y japonesa sus hojas y sus frutos son utilizados desde la antigüedad para el tratamiento de problemas respiratorios, de circulación o pérdida de memoria, en occidente no fue hasta el siglo XX que se empezó a estudiar las propiedades del Ginkgo biloba. El Dr. Schwabe fue quién registró una marca para uso medicinal de este producto. Se ha investigado mucho sobre sus cualidades y beneficios a través de ensayos clínicos que confirman sus beneficios.

Como anécdota, podemos mencionar que el propio Goethe dedicó en una de sus obras en el siglo XIX un poema a una de sus amantes, titulado «Ginkgo biloba». También Elena Martín Vivaldi, la poetisa española de principios del s XX escribió un poema al Ginkgo biloba.

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 ¿Para qué se usa?

El extracto de Ginkgo biloba, por su acción antioxidante neutraliza los radicales libres de oxígeno e hidroxilo que se ven aumentados en la isquemia de los tejidos. Se ha notado que el extracto mejora la microcirculación cerebral. Normalizando la viscosidad sanguínea y así evitar la formación de trombos en los lechos de la microcirculación. Esta acción benéfica se ha visto también en la isquemia renal y en riñones trasplantados para evitar la agregación plaquetaria.

Ginkgo biloba – Indicaciones terapéuticas

El extracto de Ginkgo biloba se utiliza en pacientes con insuficiencia circulatoria cerebral, cuando se detecta vértigo, acúfenos, problemas de carácter y afectivos. También está indicado en secuelas de accidentes cerebrovasculares y traumatismos del encéfalo y cráneo. En trastornos vasculares periféricos como el síndrome de Raynaud. Disminución de la memoria y del estado de alerta y atención. En el tratamiento de la isquemia cerebral.

Precauciones especiales

Las personas con hemorragia uterina, cerebral reciente, gastrointestinal aguda, hipotensión arterial de gravedad e infarto del miocardio en evolución, deben evitar administrarse el fármaco en ninguna de sus presentaciones farmacéuticas.

Se presenta en forma de solución en gotas y en comprimidos o tabletas.